Casualmente nos dimos una vuelta por el Complejo Arqueológico de Sacsayhuaman y nos dimos con la sorpresa de que el Instituto Nacional de Cultura ha dispuesto la realización de trabajos de exploración y en algunos casos restauración y puesta en valor de varios sectores de este complejo arqueològico. Hasta aqui no habría nada de malo si es que cuando uno se apersona por estas zonas se da con la sorpresa de que ningún obrero labora, las obras están paralizadas.
Lo que es más incomprensible es que por estos trabajos los turístas nacionales y extranjeros no pueden acceder a varios sectores principalmente en la zona de los muros ciclopeos y el recorrido practicamente es corto y nada atactivo, pero sin embargo el costo por el ingreso a este complejo sigue siendo el mismo; nos parece bién que el INC haga su trabajo, pero porqué debe durar meses y meses, año tras año; a este paso los visitantes nunca podrán apreciar en su real magnitud uno de los monumentos arqueológicos de mayor renombre de nuestra ciudad.
Así mismo pudimos apreciar como un sufrido trabajador realizaba los trabajos de corte del gramado de la explanada del Sacsayhuaman con una podadora insignificante; tanto dinero que recauda el INC y no es capáz de adquirir una podadora de mayor capacidad para realizar el trabajo en mucho menor tiempo y sin tanto desgaste de energía. Se ve que hace falta mucho criterio y sentido común en la Dirección Departamental del Instituto Nacional de Cultura.
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